La palabra mundo (del griego kosmos) aparece 213 veces en el Nuevo Testamento.

Los calvinistas tienen dificultades con versículos como Juan 1:29, 3:16 y 1 Juan 2:2, porque dichos versículos indican que Cristo murió por los pecados de todo el mundo y que Dios ama a todo el mundo.

Tienen una manera ingeniosa de explicar por qué esos versículos no están diciendo que Cristo murió por todos ni que Dios ama a todos. Los calvinistas sugieren que la palabra mundo a veces se refiere a un pequeño grupo de la humanidad, a quienes llaman los elegidos. Desde esta perspectiva, en la eternidad pasada, antes de que naciera un solo ser humano, Dios escogió a aquellos que tendrían vida eterna. No se basó en su omnisciencia para prever quiénes creerían libremente en Jesús. No basó su elección en nada que hubiera en los escogidos. Simplemente eligió a un pequeño porcentaje de la humanidad, y no al resto. Los que no fueron escogidos, es decir, la gran mayoría, están sentenciados a la condenación eterna incluso antes de nacer.

En nuestra reunión del consejo de GES del 17 al 18 de enero, hablé con uno de los miembros del consejo sobre la visión calvinista de la elección. Él dijo: “Si Dios solo elige a un pequeño porcentaje de la humanidad, entonces, sin importar cómo se explique, Él está eligiendo que la gran mayoría de la humanidad sea condenada eternamente, pase lo que pase”. Rechazó la idea sostenida por la mayoría de los calvinistas de que Dios no elige a algunos para condenación; simplemente no los elige para ser regenerados. Estoy de acuerdo con mi amigo del consejo. Si eso es cierto, entonces Dios escogió a la mayoría de la humanidad para el lago de fuego.

Veamos cómo interpretan los calvinistas 1 Juan 2:2, que dice: “Y él es la propiciación por nuestros pecados; y no solamente por los nuestros, sino también por los de todo el mundo”.

John Piper comenta:

…hay hijos de Dios, u ovejas, esparcidos por todo el mundo. Como dice Juan en Apocalipsis 5:9: “tú fuiste inmolado, y con tu sangre nos has redimido para Dios, de todo linaje y lengua y pueblo y nación”. No redimió a todos. Dio su vida en rescate por muchos (Marcos 10:45). No propició la ira de Dios contra todos. Pero dio su vida por las ovejas. Ellas están esparcidas por todo el mundo, en toda lengua, tribu, pueblo y nación (ver aquí en el punto 3. “Don’t Hog Jesus” [2:2b]).

De manera similar, John MacArthur, en un mensaje sobre 1 Juan 2:2, dice:

Jesús en la cruz ofreció una expiación para aquellos en Israel que se arrepintieran y creyeran, y también para aquellos en todo el mundo que se arrepintieran y creyeran. No es una apaciguación universal de Dios. Jesús no pagó por los pecados de Judas, porque cuando Judas murió, fue a su propio lugar a pagar por sus propios pecados. Jesús no pagó por los pecados de Herodes. Jesús no pagó por los pecados de Pilato. Jesús no pagó por los pecados de Adolf Hitler. Jesús no pagó por los pecados de la multitud que clamaba por Su sangre.

Jesús no pagó por los pecados de esa gran masa de humanidad que se presentará ante el gran trono blanco y será arrojada al lago de fuego por los siglos de los siglos, donde darán satisfacción a la ley de Dios que han ofendido. Pero sí pagó por los pecados de todos los que creerán, en Israel y en el mundo. El punto es que esto va más allá de su idea provincial de la propiciación. Y Él no solo hizo que la salvación fuera una opción; en realidad compró la salvación para todos los que se arrepientan y crean, porque han sido llamados por Dios. Fue una sustitución real (ver aquí).

Encuentro declaraciones como estas muy inquietantes.

La postura calvinista incurre en una excepción arbitraria. Ignora el significado obvio de muchos pasajes (por ejemplo, Juan 1:29; 3:16; 2 Pedro 2:1; 1 Juan 2:2). Esto lleva a lo que muchos consideran una visión monstruosa de Dios, la cual permite que la mayoría de la humanidad nazca sin posibilidad alguna de regeneración.

La palabra mundo se usa de tres o cuatro maneras diferentes en el Nuevo Testamento. A veces se refiere a nuestro planeta (por ejemplo, Juan 13:1; Efesios 1:4) e incluso posiblemente a todo el universo (Hechos 17:24; Filipenses 2:15). Kosmos también se refiere a todas las personas del planeta (Romanos 3:19). Y a veces se refiere al sistema de pensamiento opuesto a Dios, es decir, el sistema mundano (Juan 7:7; 15:18-19; 1 Juan 4:5).

En Juan 1:29, kosmos se refiere a todas las personas desde Adán y Eva hasta los últimos pecadores del Milenio. Juan 3:16 también se refiere a todas las personas de todos los tiempos. Lo mismo ocurre con 1 Juan 2:2.

No permitas que los calvinistas te confundan. Si lo hacen, no sabrás si Cristo murió por ti. No sabrás adónde irás cuando mueras. Vivirás esperando perseverar y demostrar que eres uno de los escogidos.

Mantén tus ojos en el Señor Jesucristo y en su promesa de vida eterna a todos los que simplemente creen en Él. Si lo haces, seguirás teniendo la seguridad de tu salvación. Él murió por todos, haciendo posible que todos sean salvos. Pero para ser salvo, uno debe creer en Él para recibir la vida que promete.

Mantén la gracia en el punto de mira.

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Bob Wilkin es el Director Ejecutivo de Grace Evangelical Society (Sociedad Evangélica de la Gracia). Vive en Highland Village, TX, con su esposa de 43 años, Sharon. Sus libros más recientes son Faith Alone in One Hundred Verses [Sola Fe en Cien Versículos] y Turn and Live: The Power of Repentance [Tornar y Vivir: El Poder del Arrepentimiento]