¿Tenemos que perder horas de sueño?
Pocas personas conocen a Isaac Gonzales, un hombre que vivió en Boston a principios del siglo XX. Gonzales era un hombre atormentado. Trabajaba para una empresa que almacenaba melaza junto al puerto de Boston. Los barcos descargaban la melaza en un enorme tanque metálico que, cuando se llenaba, contenía más de 2 millones de galones