“Justo cuando pensaba que estaba fuera, ¡me volvieron a meter!”
Conoces el viejo tropo de las películas muy gastado. Al dejar atrás su vida delictiva, el protagonista intenta vivir honestamente, solo para dejarse convencer a hacer “un último trabajo”—un atraco a un banco, un atentado, o un negocio de drogas. El protagonista resiste, pero sus antiguos compañeros insisten en que “se lo debe.” Así que el protagonista vuelve a meterse a regañadientes en sus viejos costumbres.
La misma dinámica a menudo ocurre en la vida cristiana.
Después de creer en Jesús, tratas de vivir honestamente y recta, solo para que tus viejos pecados llamen a tu puerta y te rueguen que hagas “un último trabajo.”
¿Qué diría Pablo a eso?
Él diría que no le debes nada a tu antigua vida. Después de todo, moriste.
Como parte de tu salvación, fuiste unido a Él, sumergido en Él, y, por lo tanto, sumergido en Su muerte. Tu antigua vida ya no tiene ningún derecho legítimo sobre ti. Puedes vivir honestamente. ¿Cómo? Pablo explica:
Porque somos sepultados juntamente con él para muerte por el bautismo, a fin de que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en vida nueva (Romanos 6:4).
Jesús murió—pero no se quedó muerto. Resucitó de los muertos por la gloria del Padre.” Eso no solo es buena noticia para Jesús, como explica Pablo, sino que la gloria del Padre tiene implicaciones para la vida cristiana también—ahora tú puedes andar en una nueva vida. Como nota Hodges, “Así, la gloria de Dios el Padre se presenta como el poder dinámico detrás del nuevo estilo de vida del cristiano en este mundo” (Hodges, Romans [Romanos], p. 168).
El hecho de que Jesús fue resucitado de los muertos por la gloria del Padre tiene implicaciones para el creyente. Al unirte a Cristo, al sumergirte en Él, Dios tiene por objetivo no solo darte una nueva posición en Cristo, sino darte un nuevo potencial para vivir.
“Así también, nosotros andemos en vida nueva.” Andar es una metáfora para ese vivir. Como creyente, puedes beneficiar ya del poder e influencia de la resurrección de Cristo, incluso si tú resurrección literal está todavía en el futuro (cf. Moo, Romans (Romanos), p. 367). Tu inmersión en Cristo rompe el poder del pecado sobre ti y te da poder para andar en una nueva vida.
Cuando tu antigua vida trate de atraerte para hacer un último trabajo, solo recuerda que Cristo te sacó y te liberó.
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Shawn Lazar es el editor de la revista Gracia en el Enfoque, y es el Director de Publicaciones para la Sociedad Evangélica de la Gracia (Grace Evangelical Society). Él y su esposa Abby tienen tres niños. Es pastor bautista ordenado. Tiene el Bachillerato en Teología de la McGill University y Maestría de la Free University of Amsterdam. Ha escrito dos libros: Beyond Doubt: How to Be Sure of Your Salvation [Más allá de la duda: cómo estar seguro de su salvación] y Chosen to Serve: Why Divine Election Is to Service, Not to Eternal Life [Elegido para servir: por qué la elección divina es al servicio, no a la salvación eterna].