Casi todo me interesa.
Hay varios idiomas que me gustaría aprender bien – griego moderno y koiné, hebreo, afrikáans, alemán, sueco y español, para comenzar.
Hay muchos instrumentos que me gustaría aprender a tocar bien-marimba, piano, ukelele, trompeta y el órgano Hammond B3.
Quiero ser un mejor pintor e ilustrador. Me gustaría emular la precisión con la que Miguel Ángel representó la musculatura del cuerpo humano, tanto como el regionalismo bulboso de Grant Wood.
Me gustaría comprender mejor la economía austriaca.
Me encantaría aprender a diseñar un edificio desde cero, es decir cada parte del proceso, desde la carpintería hasta la plomería. Todo.
También hay tanto que me interesa en cuanto a la manera en que funciona el universo. ¿Qué es un agujero negro? ¿Qué hay al otro lado? ¿Cómo interactúa la mente con el cerebro? ¿Cómo se traduce lo que el ojo “ve” en lo que la mente “percibe”? ¿Cómo puede volar el abejorro?
¡No bastaría una vida para aprenderlo todo!
¿Qué vamos a hacer en la próxima vida? ¿Qué haremos en el reino y por toda la eternidad?
Sabemos que seremos vivos. Sabemos que tendremos cuerpos. Sabemos que estaremos en la nueva tierra (Ap 21:1). ¿Pero qué estaremos haciendo?
La Biblia guarda silencio. Por la mayor parte. Nos ofrece pistas, pero no respuestas claras.
Por ejemplo, de Génesis 1-2, sabemos que el hombre fue creado originalmente para trabajar:
Tomó, pues, Jehová Dios al hombre, y lo puso en el huerto de Edén, para que lo labrara y lo guardase (Génesis 2:15).
El hombre estaba destinado a trabajar. Si Adán y Eva nunca hubieran pecado, ¿habría terminado su trabajo?
¿Eso podría ser lo que nosotros haremos por la eternidad también? ¿Trabajando? ¿Cuidando y manteniendo la nueva tierra? ¿Retomando donde Adán lo dejo?
El libro del Apocalipsis nos dice que estaremos sirviendo al Señor para siempre:
Y no habrá más maldición; y el trono de Dios y del Cordero estará en ella, y sus siervos le servirán (Ap 22:3).
¿Qué tipo de servicio será? Incluirá la actividad de gobernar (2 Tim 2:12; Ap 20:6). ¿Habrá lenguaje, cultura, ciencia, y arte en la eternidad? Me interesa saber eso también.
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Shawn Lazar es el Editor de la revista Gracia en el Enfoque, y es el Director de Publicaciones para la Sociedad Evangélica de la Gracia (Grace Evangelical Society). Él y su esposa Abby tienen tres niños. Es pastor bautista ordenado. Tiene el Bachillerato en Teología de la McGill University y Maestría de la Free University of Amsterdam. Ha escrito dos libros: Beyond Doubt: How to Be Sure of Your Salvation [Más allá de la duda: cómo estar seguro de su salvación] y Chosen to Serve: Why Divine Election Is to Service, Not to Eternal Life [Elegido para servir: por qué la elección divina es al servicio, no a la salvación eterna].