Dios odia la muerte. Aún así, en Cristo, Dios transformó la muerte para que sea una parte de Su ministerio. Me chocó esta cita de Andy Root: El movimiento a través de la muerte hacia la vida es la propia forma del ministerio de Dios” (Root, Christopraxis, p. 105). ¿Cómo se ha convertido el movimiento de la muerte a la vida en la forma del ministerio de Dios?

Pienso en cómo la conversación de Jesús con Marta en Juan 11 lo ilustra. Jesús se reunió con Marta cuatro días después de la muerte de su hermano, Lázaro.

“Jesús le dijo: tu hermano resucitará” (v 23).

Marta no entendió de inmediato lo que Jesús quiso decir:

“Marta le dijo: Yo sé que resucitará en la resurrección, en el día postrero” (v 24).

Ella asumió que Él estaba refiriéndose a la resurrección general de los muertos, a la que se habían referido Job y Daniel (Job 19:25-26; Dan 12:2). Pero eso no fue exactamente lo que Jesús quiso decir.

“Le dijo Jesús: Yo soy la resurrección y la vida” (v 25a).

Marta estaba pensando en la resurrección como un evento futuro. Pero Jesús se estaba señalando a sí mismo. Él es el evento.

Jesús es la resurrección.

Así es que la propia forma del ministerio de Dios es el “movimiento de la muerte a la vida.” La resurrección presupone la muerte. En lugar de dejar que la muerte tuviera la última palabra, Jesús murió en la cruz y luego pasó de la muerte a la vida al resucitar de entre los muertos al tercer día. Y eso se convirtió en Su ministerio para nosotros. El patrón de Cristo de muerte a resurrección es el que siguen todos los creyentes que mueren:

“el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá. Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente. ¿Crees esto?” (vv 25b-26).

Incluso si un creyente muere físicamente, como lo hizo Lázaro, y como lo haría Marta más tarde, vivirá de nuevo. ¿Ella creía eso?

Si sigues leyendo hasta el v 27, verás que ella lo creía. Pero a diferencia de Marta, muchas personas dentro y fuera del cristianismo no están tan seguras. Ellos no creen en Jesús para la salvación eterna y no están seguros de lo que les pasará después de la muerte. Esperan que vivirán con Dios para siempre, pero también lo dudan.

Si eso te describe, en vez de pensar en la resurrección como algo que sucede en el futuro, deberías entender que Él es alguien que te ofrece la vida eterna ahora mismo. En lugar de esperar un buen resultado en algún momento después de la muerte, pon tu fe en Jesús para obtener la vida que Él te promete hoy.

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Shawn Lazar es el Editor de la revista Gracia en el Enfoque, y es el Director de Publicaciones para la Sociedad Evangélica de la Gracia (Grace Evangelical Society). Él y su esposa Abby tienen tres niños. Es pastor bautista ordenado. Tiene el Bachillerato en Teología de la McGill University y Maestría de la Free University of Amsterdam. Ha escrito dos libros: Beyond Doubt: How to Be Sure of Your Salvation [Más allá de la duda: cómo estar seguro de su salvación] y Chosen to Serve: Why Divine Election Is to Service, Not to Eternal Life [Elegido para servir: por qué la elección divina es al servicio, no a la salvación eterna].