Jeff hizo una pregunta de seguimiento sobre un artículo reciente que escribí titulado, ¿Dónde dijo Chafer que no tenemos un problema de pecado; tenemos un problema de hijo? Véase aquí. Jeff dijo,
Sin embargo, Apocalipsis 21: 8 parece ir en contra de ese pensamiento, haciendo que el dicho [los no creyentes no tienen un problema de pecado, tienen un problema de Hijo] sea, en el mejor de los casos, inexacto: “Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda.”
Parece que, basado en este versículo, lo siguiente es cierto:
- Sus pecados les son imputados.
- Necesitan lidiar con su problema de pecado.
- Los libros de obras pueden definirse como sus pecados. Y,
- La razón por la que están en el lago de fuego es su pecado, y no sólo su incredulidad.
Escribí sobre Apocalipsis 21:6-8 anteriormente. Véase aquí. )
Sin embargo, la pregunta de Jeff es un poco diferente y así discutiré las ramificaciones de Apocalipsis 21:8.
Apocalipsis 21:6-8 describe a tres tipos de personas diferentes: el creyente que entra en el reino pero que no reinará con Cristo (v. 6), el creyente vencedor que reinará con Cristo (v. 7), y el no creyente que estará excluido del reino y pasará la eternidad en el lago de fuego (v. 8).
Los mismos tres grupos se ven en Apocalipsis 22:14-17, aunque el orden es diferente: los vencedores que reinarán con Cristo (v. 14), los no creyentes que están fuera del reino (v. 15), y el creyente que simplemente recibió el agua de la vida (v. 17).
Al final de Apocalipsis 21, el Señor revela que fuera del reino estarán todos los pecadores, cuyos nombres no están en el Libro de la Vida (Ap 21:27).
La clave (para entender este concepto) es el Libro de la Vida. Las personas cuyos nombres están en el Libro de la Vida estarán en el reino. Las personas que no están en el Libro de la Vida serán arrojadas al lago de fuego (Ap 20:15; 21:27). La forma en que las personas entran en Libro de la Vida es creyendo en Jesús para vida eterna (p. ej., Lucas 10:20; Fil 4:3). Los no creyentes mueren en sus pecados (Juan 8:24). Eso significa que siempre serán pecadores esclavizados al pecado. Decir que no habrá pecadores en el reino es decir que solo los que están en el Libro de la Vida estarán en el reino. Los no creyentes no están excluidos del reino porque pecaron en esta vida (¡Nosotros también!). Están excluidos porque no están en el Libro de la Vida (¡Nosotros sí!) Hay consecuencias para los hechos que hacen en esta vida, y el grado en que serán atormentados dependerá de sus obras.
Ahora respondamos los cuatro puntos de Jeff directamente:
Primero, la palabra traducida como imputar es logizomai. Significa “acreditar algo a alguien” (BDAG). Es decir, nuestros pecados fueron contados a Jesús (2 Cor 5:21) y Su justicia es contada a todos los que creen en Él (2 Cor 5:21). El Nuevo Testamento nunca se refiere a que el propio pecado sea imputado a uno mismo. Pero, si entiendo el punto de Jeff, sí, los incrédulos tienen malas obras que serán examinadas en el libro de obras (Ap 22:12). Serán evaluadas como obras (según Apocalipsis 20:12-13), no como pecados per se.
En segundo lugar, ya que rechazan el regalo gratuito de la vida eterna, estarán en el lago de fuego. Pero su grado de tormento allí estará basado en sus obras (no sus pecados). Eso incluye sus malas obras.
En tercer lugar, el libro de obras no es un libro de pecados. Se llama un libro de obras (Ap 20:12-13). Las obras son tanto buenas como malas. Es un error pensar que un no creyente tendrá malas obras en su registro. Los no creyentes tendrán muchas buenas obras en los libros. Piensa en todas las personas que nunca creyeron en Jesús para la vida eterna y, sin embargo, alimentaron a los hambrientos, sanaron a los enfermos, visitaron a los prisioneros, amaron a sus esposos y niños y prójimos, etc. Dado que los no creyentes aún así retienen la imagen de Dios, hacen buenas obras. ¿No dijo el Señor Jesús que incluso los padres no creyentes dan buenos regalos a sus hijos (Lucas 11:11)?
Cuarto, la razón por la que estarán en el lago de fuego será únicamente porque nunca creyeron en Jesús y así, sus nombres nunca fueron inscritos en Libro de la Vida (Apocalipsis 20:15). No obstante, el grado de tormento que experimentarán en el lago de fuego se relacionará directamente con sus obras, tanto buenas como malas.
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Bob Wilkin es el Director Ejecutivo de Grace Evangelical Society (Sociedad Evangélica de la Gracia). Vive en Highland Village, TX, con su esposa de 43 años, Sharon. Su libro más reciente es Turn and Live: The Power of Repentance [Tornar y Vivir: El Poder del Arrepentimiento]
